Un perfume en el aire me recuerda
que el corazón existe sin remedio
y el tormento de saberte en otros brazos
no me deja pensar y me da miedo.
Miedo de no poder mostrarte algo
de lo que soy, más allá de mi cuerpo
y de estas ansias grandes
que acontecen, cada día, todo el tiempo.
Si las palabras nada significan,
¿para que las recuerdo?
¿para que las repito, sino tienen misterio?
Ojala pudieras darte cuenta
que somos más que carne,
más que miedo,
más que todo y aún somos,
todavía un misterio.