Porqué te escribo a ti
que está tan lejos,
que no me miras,
ni me buscas,
ni me llamas.
¿A quién le debo
que parezco ahora endeudada,
con la desgracia de saberte indiferente?
¿Cuál es el mérito?
¿Cuál es el daño?
¿A quién someteré para encender
la llama de tus ojos en mi ser?
¿Y si desconociera mi verdad?
¿Y si me dispusiera a aborrecerte?
¿Adónde quedarían mis sentimientos?
¿Adónde la ilusión?
Yo quiero sentir más,
quiero ser todo,
aquella que te haga desmirarte,
la dueña de tus sueños,
tu aventura,
la dueña de tus lunes,
de tus martes.
Estarás en tu cama tranquilo
¿soñaras conmigo o con ella?