Ayer me cruce con una pareja de ancianos que estaban en mejor condición física y psicológica que yo, estaban radiantes, en comparación conmigo que camino por la calle como un fantasma. Hace varios días que no estoy bien, que mi cuerpo manifiesta señales por todos lados, soy un síntoma andante. Adentro tengo tanto dolor, tanto miedo tanta angustia que a veces parece que voy a dejar de respirar. Se acabó si sigo en este tren me muero…
Lo positivo de todo lo que pasó, es que puso las cosas en perspectiva, y me hizo ver que hay algunas que son más importantes que otras. Hoy en día pertenezco a ese conjunto de mujeres cuyas ex parejas han violentado, me asustaron, me marcaron, solo porque un tipo considera que soy de su pertenencia, aunque ya hace un tiempo que no estamos juntos. Solo porque dije que no repetidas veces y sostengo el no.
Me atacó en plena calle, a plena luz del día, no me dio tiempo a nada, solo atiné a gritar para pedir ayuda y la gente me miraba como si fuera yo la que estaba fuera de lugar, cuando era a mí a quien empujaban en la calle.
A todas aquellas mujeres que me dijeron que no me iban a ayudar, les digo, esos son los hombres que han criado, y que crían todos los días, hombres que piensan que a una mujer se le puede hacer cualquier cosa, y esas son las mujeres que también educan, mujeres que bajan la cabeza mientras les sacan hasta las ganas de vivir. Ahora ya hice la denuncia como corresponde y me voy a refugiar en la ley, en lo que diga mi abogada para continuar con esto y a las mujeres que alguna vez alguien les puso la mano encima, les digo, no se dejen amedrentar, sino tienen a nadie busquen que siempre van a encontrar, muévanse ustedes mismas, pero hagan algo, salgan del estado de quietud, escapen, griten pero no se dejen maltratar, no dejen que les digan lo que no son, no permitan que nadie les diga lo que tienen que hacer, no permitan que nadie las toque si no es para darles una caricia.
Y a vos muchas gracias, sin tu ayuda no sé qué hubiera hecho…